Métodos de control ecológico
- microbiolabecuador
- Apr 17, 2024
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Los métodos para el control ecológico constituyen alternativas a los plaguicidas químicos y tienen el propósito de reducir o suprimir poblaciones y afectaciones de organismos nocivos (plagas y enfer-medades); pero, su eficacia no es tan elevada como las moléculas químicas, por ello se recomienda integrarlos paulatinamente a la par de la transformación de los sistemas de producción (fincas); para lograr condiciones adecuadas para su utilización eficiente.
Los principales métodos ecológicos para el control de poblaciones de organismos nocivos (insectos, ácaros, moluscos, roedores, hongos, nematodos y otros) son los bioplaguicidas microbiológicos, los artrópodos entomófagos y los preparados botánicos. También se consideran los plaguicidas minerales, como la cal y la zeolita, entre otros.
BIOPLAGUICIDAS
Los bioplaguicidas a base de microorganismos beneficiosos son muy utilizados en el control de poblaciones de insectos y ácaros no-civos, así como de nematodos, hongos y bacterias fitopatógenas.
Los bioplaguicidas de origen microbiológico producidos por métodos artesanales, han adquirido gran importancia debido a diversas ventajas, principalmente que se pueden obtener local-mente, los insumos son de fácil adquisición, se favorece el manejo. de especies y cepas de acuerdo a las campañas de cultivos y los sistemas de aplicación pueden ser diversos, entre otros aspectos que los convierten en tecnologías adecuadas para la sustentabilidad.
Debido a las características y los modos de acción de estos bioproductos, es necesario cumplir determinadas precauciones, ya que el producto que se utilice sea sólido o líquido, est´formado por las esporas de los microorganismos, sus toxinas y el sustrato donde se cultivó, lo que constituye una biomasa que le otorga ciertas particularidades al mismo, que deben ser consideradas en la tecnología de aplicación.

Entomopatógenos
Son microorganismos que causan enfermedades en poblaciones de insectos y ácaros, de los cuales algunas especies y cepas se utilizan para su reproducción masiva, debido a su eficacia comprobada.
Bacillus thuringiensis. Bacteria que actúa por ingestión, lo que significa que el bioproducto debe llegar y cubrir el órgano de la planta del cual se está alimentando el insecto, para que junto con el alimento se lleve la bacteria al interior de su cuerpo, donde produce una septicemia causándole la muerte (figura 4). Se emplea principalmente contra insectos nocivos del orden Lepi-doptera en diversidad de culti-vos. Las dosis se ajustan en dependencia de la concentración final del producto, de los hábitos del insecto o ácaro nocivo y del grado de infestación, aunque generalmente están alrededor de 1-2 Lha y la solución final de aplicación no debe tener menos de 107 esporas /mL.
Beauveria bassiana. Hongo que actúa principalmente por con-
tacto, cuando el conidio se adhiere a la cutícula del insecto, luego germina y penetra al interior, donde se multiplica y culmina con la muerte del insecto por micosis. Con este microorganismo se producen bioplaguicidas para el control de insectos nocivos, principalmente el picudo negro del plátano (Cosmopo-lites sordidus), el picudo verde-azul de los cítricos (Pachnaeus litus), el tetuán del boniato (Cylas formicarius), la broca del café (Hypothenemus hampei), los crisomélidos en hortalizas y granos (Diabrotica, Andrector), entre otros coleópteros; también se utiliza para el control de pulgones (Aphididae), moscas blancas (Aleyrodidae), salta hojas (Cicadellidae, Delphacidae), las chinches (Pentatomidae, Tingitidae), las hormigas cortadoras de hojas (Atta), entre otros insectos.
Metarhizium anisopliae. Actúa muy similar a la especie anterior . Se utiliza para el control del picudo negro del plátano (Cosmopolites sordidus), el tetuán del boniato (Cylas formicarius), el picudito acuático del arroz (Lissorhoptrus ory-zophilus), el salta hojas del maíz (Peregrinus maidis), el thrips de los melones (Thrips palmi) en papa y frijoles, entre otros insectos nocivos.
Lecanicillium lecanii. Actúa muy similar a las anteriores Es efectivo contra la mosca blanca (Bemisia tabaci), pulgones (Aphididae) y otros insectos nocivos.
Entomonematodos
Los nematodos entomopatógenos o entomonematodos, están capacitados para buscar y matar rápidamente a su hospedador (insectos nocivos), muestran una alta virulencia y elevada tasa de reproducción, y se establecen en el suelo si las condiciones de humedad son buenas.
La falta de humedad y las radiaciones solares directas afectan sensiblemente a estos organismos y limitan su desplazamiento en la búsqueda del huésped.
El modo de acción consiste en la penetración del nematodo y la acción de la bacteria simbionte que es patógena por ingestión. La bacteria trasportada por los nematodos al hospedero, penetra en el he-mocele hasta la hemolinfa del insecto, donde proliferan, matan al insecto y crean las condiciones para la reproducción del nematodo.
En Cuba se produce la especie Heterorhabditis bacteriophora, que se aplica contra insectos nocivos del suelo y el follaje de la planta, con buena eficacia, principalmente contra el picudo verde azul de los cítricos (Pachnaeus litus) en viveros, el tetuán (Cylas formicarius) y el crisomélido verde brillante (Typophorus nigritus)
en boniato, entre otros.
Antagonistas
Son hongos y bacterias beneficiosas, que controlan poblaciones de hongos y bacterias fitopatógenas. También se conocen como bio-plaguicidas. Su mecanismo de acción es variado, según la especie y cepa. Se pueden producir artesanal o industrialmente en laboratorios o plantas especializadas.
De los bioplaguicidas con efectos sobre los fitopatógenos, se destacan las enfermedades causadas por hongos y nematodos, se utiliza principalmente especies y cepas de hongos del género Trichoderma; sin embargo, otros organismos con estos efectos están en fase de introducción en la práctica o en desarrollo como bioproductos.
Debido a que la mayoría de los fitopatógenos se desarrollan en el suelo, la tecnología de utilización de estos bioproductos está muy relacionada con el manejo del suelo, por lo que se integra de manera decisiva con otras prácticas, principalmente el sistema de preparación del suelo, el uso de abonos orgánicos, la micorrización y el sistema de siembra o trasplante, entre otros.
Trichoderma harzianum. Es un tipo de hongo que se encuentra de manera natural en un número importante de suelos agrícolas y otros tipos de medios, del cual existen diversas especies.
Posee un rápido crecimiento y desarrollo, también produce una gran cantidad de enzimas, inducibles con la presencia de hongos fitopatógenos. Su modo de acción contra los hongos fitopatógenos es complejo, donde están incluidos el quimiotaxismo, la antibiosis y el parasitismo.
Se emplea contra enfermedades conocidas como patógenos del suelo, que pertenecen a los géneros Fusarium, Rhizoctonia, Phytium, Phytophthora y otros.
Bacillus subtilis. Bacteria que afecta la germinación de las esporas de los hongos fitopatógenos, con los que también compite con el sustrato en la rizosfera y filosfera de la planta; produce ade-más, antibióticos fungotóxicos y promueve el crecimiento del sistema radicular, a la vez que estimula la asimilación de nutrien-tes. Se ha comprobado que, al establecerse en las raíces y hojas induce a la planta a producir fitoalexinas, que le dan resistencia al ataque de hongos, bacterias y nematodos fitopatógenos.
Se ha documentado la efectividad de esta bacteria contra fitopatógenos de los géneros siguientes: los hongos Botrytis, Coletotrichum, Fusarium, Oidium, Phytophthora, Pythium. Rhyzoc-tonia, Rhizopus; y las bacterias Erwinia, Pseudomonas y Xanthomonas.
Nematodopatógenos
Son hongos y bacterias que parasitan y predan nematodos fitoparásitos. También se conocen como bioplaguicidas. Se pueden producir artesanal o industrialmente en laboratorios o plantas especializadas. En los últimos años se han logrado nuevos bioproductos que están en diferentes etapas de generalización.
Trichoderma viride (cepa TS-3). Hongo que afecta a los nematodos formadores de agallas (Meloidogyne spp.) de dos modos: parasitismo directo en juveniles de segundo estado y huevos, o la producción de metabolitos tóxicos.
Tsukamurella paurometabola. Bacteria que actúa mediante la liberación de sulfuro de hidrógeno y quitinasas. Se está generalizando la cepa C-924 bajo el nombre comercial de Hebernem, que se recomienda como efectivo contra Meloidogyne spp., Ra-dopholus similis y Pratylenchus spp.
Pochonia chlamidosporia. Hongo que es un parásito facultativo de huevos de nematodos formadores de agallas y quistes. Se está introduciendo en la práctica bajo el nombre comercial de
KlamiC.
Bacillus thuringiensis. Bacteria que produce toxinas, amilasas, lipasa, lecitinasa y proteasas; que provocan la deformación y detención del proceso embrionario de los huevos, así como vacuoli-zaciones y deformaciones en el sistema digestivo de los juveniles
(J2) del nematodo, con un 80% de reducción en la eclosión de las masas de huevos (figura 9). Se está introduciendo la cepa 25 con el nombre comercial de Thurisav25. Se utiliza en el control del nematodo de las agallas (Meloidogyne incognita).
ARTRÓPODOS ENTOMÓFAGOS (predadores y parasitoides)
Son insectos, ácaros y arañas de diferentes familias, que se alimentan o predan y parasitan insectos y ácaros nocivos. Para programas aumentativos, se utilizan especies que han demostrado buenas tasas de regulación, las que se pueden producir en laboratorios o insectarios especializados y en insectarios o jaulas de campo (crías rústicas).

Entomófagos parasitoides
Son insectos (avispitas y moscas) que parasitan otros insectos (huésped), principalmente en fase inmadura (huevo, larva, pupa, ninfa), aunque algunos parasitan adultos.
Se llaman parasitoides porque una parte de su vida, generalmente las de huevo, larva y pupa, la realizan sobre o dentro del insecto huésped.
Mientras estos se desarrollan en su interior, el huésped disminuye su actividad hsta que muere, momento en que coincide con la terminación del ciclo biológico del parasitoide.
La fase adulta es libre. En esta última se reproduce y busca nuevos insectos huéspedes para parasitarlos, fase en la cual se alimentan de néctar y polen de flores, secreciones azucaradas de las plantas.
Existen diversidad de especies con estos hábitos, algunas se crían masivamente y se liberan en campo.
Trichogramma spp. Es una avispita muy pequeña, que parasita los huevos de lepidópteros, se libera en los campos durante las primeras etapas del cultivo, inmediatamente que los adultos arriban y comienzan a ovopositar.
Se utiliza con eficacia contra especies nocivas en diferentes cul-tivos, principalmente la primavera de la yuca (Erinnyis ello), el falso medidor de los pastos (Mocis latipes), el bórer de la caña de azúcar (Diatraea saccharalis), la polilla de la col (Plutella xylostella), entre otras. También muestra efectividad en la lucha contra polillas de almacén (Sitotroga cerealella, Corcyra cepha-lonica, Ephestia spp., Plodia interpunctella), sea en almacenes o silos convencionales, así como en depósitos rústicos de granos y semillas en las propias fincas.
Entomófagos predadores
Son insectos, ácaros y arañas que comen o succionan a otros insectos y ácaros, causándoles la muerte de inmediato. Atacan a diversos grupos de presas, principalmente las fases que son de cuerpo débil (blandos), como huevos y larvas de lepidópteros y otros insectos, ácaros, pulgones, moscas blancas, thrips, entre otros.
Cotorritas (Cycloneda sanguinea, Coleomegilla cubensis, Cryp-tolaemus montrouzieri y otras). Se liberan en los campos y sus alrededores contra áfidos, moscas blancas, ácaros, cochinillas harinosas, thrips y otros insectos nocivos.
Crisopas. También se liberan para el control de huevos de lepi-dópteros, pulgones, ácaros y otros.
Predadores de ácaros
Existen especies de ácaros que actúan como predadores de ácaros nocivos a los cultivos, que se crían puntualmente y se liberan en los campos.
Ambliseus limonicus. Es un ácaro predador que controla el ácaro de la yuca (Schizotetranychus caribbeanae).
Phytosiulus macropilis. Es un ácaro que se utiliza en los cultivos de plátano, frijol y yuca, para el control de Tetranychus tumidus (plátano) y de Schyzotetranychus caribbeanae.
PREPARADOS BOTÁNICOS
Órganos o partes de plantas que se utilizan para el control de insectos, ácaros, moluscos, hongos y otros organismos nocivos, debido a sus propiedades biocidas. Constituyen biopreparados que se elaboran artesanalmente mediante diferentes técnicas, como por ejemplo el secado y molinado.
Los preparados botánicos son aquellas extracciones alcohólicas, acuosas, cocciones, polvos, fermentados y lixiviados que se elaboran de manera artesanal por el propio agricultor, a partir de plantas o sus partes, que cultivan o colectan en su finca o lugares cercanos y que se emplean por sus propiedades como plaguicidas, antiali-mentarios, repelentes, coadyuvantes, diluyentes, entre otras.
Estos biopreparados se utilizan en forma sólida y líquida, se asperjan o espolvorean (motean) sobre el follaje de las plantas, se incorporan al suelo, se mezclan con las semillas, entre otras formas de utilización en la lucha contra organismos nocivos.
Pueden ser elaborados a una escala artesanal o semi mecaniza-da, lo que les confiere ciertas ventajas para el agricultor, debido a que lo elabora cuando lo va a utilizar, por lo que es más sostenible cuando la planta (materia prima) la cultiva en la propia finca. Muchas veces estas plantas se siembran como parte de la cerca viva o en sitios no explotados, como se hace para la utilización del cardón o Cardona (Euphorbia lactea).
También puede ser utilizada directamente la biomasa vegetal (órganos de la planta con propiedades como plaguicida) para ser incorporado al suelo o depositados en su superficie, con el propósito de que al descomponerse se produzca una actividad biocida, debido a emanaciones de gases tóxicos (biofumigación) o sustancias lixiviadas.
Existen en la flora diversidad de plantas con propiedades como plaguicidas botánicos, muchas de las cuales se utilizan localmente.
Las de mayor utilización son las hojas y frutos del nim y los restos secos de las hojas del tabaco.

Nim
El árbol del nim (Azadirachta indica) tiene propiedades como repelente, antialimentario, esterilizante, desorientador de la ovo-posición, insecticida y regulador del crecimiento. Actúa por contacto ingestión. También actúa como fagodisuasivo (antialimen-tario) por lo que los insectos dejan de comer, pierden peso y se interrumpe su crecimiento y desarrollo, causando la muerte entre los cuatro y seis días.
Es uno de los insecticidas botánicos más utilizados, a partir de formulaciones comerciales o de biopreparados que se elaboran de manera artesanal por los propios agricultores, quienes siembran el árbol en su finca.
Tabaquina
Los residuos (venas, polvillo, restos) de la hoja del tabaco (Nico-tiana tabacum) obtenidos durante la elaboración de este producto, poseen una alta concentración de nicotina, por ello se ha demostrado que tiene una elevada actividad como insecticida, al actuar por asfixia, contacto, así como por ingestión.
Se utiliza ampliamente mediante la elaboración rústica de biopreparados para su aplicación contra diversos insectos nocivos
en cultivos.
Adherentes y tensoactivos
En algunos casos se puede mejorar la actividad biológica de los preparados botánicos y otros insecticidas con la adición de adherentes y tenso activos de origen botánico, como el jugo de la sábila (Aloe spp.), que tiene propiedades adherentes y el jugo del henequén (Agave fulcroides) y del jaboncillo (Sapindus saponaria) que son tensoactivos.
Lixiviados del raquis del plátano
Los ácidos fúlvicos extraídos mediante lixiviación del raquis de plátano, contienen una alta concentración de potasio, el cual tiende a inducir resistencia a algunas enfermedades mediante aspersiones foliares, lo cual se ha informado efectivo contra mildiu en rosa, sigatoka en plátanos y como nutriente en tomate.
Los productores de banano que procesan en la propia finca para envasar los racimos aprovechan el raquis y lo procesan en un lixiviador. Para esto pueden utilizarse recipientes plásticos de gran capacidad o tanques de mampostería construidos al efecto (cisterna), en el fondo de los cuales coloca un tubo de salida, para cosechar el líquido que se lixivia del raquis (figura 18). El lixiviado se almacena en recipientes plásticos y se utiliza a partir de los 90 días de obtenido, para lo cual se prepara una solución al 5%.
PLAGUICIDAS MINERALES
El uso de determinados minerales en la lucha contra organismos nocivos ha sido variable y generalmente en sustitución de moléculas químicas ante situaciones muy específicas. No obstante, se ha demostrado que estos pueden ser efectivos cuando se utilizan racionalmente. Durante muchos años se han explotado el cobre y la cal, aunque se aprecian avances con la zeolita.
Cal hidratada. Se ha generalizado como un efectivo protector de las plantas contra organismos fitopatógenos, por lo que se emplea regularmente con carácter preventivo en aplicaciones fo-liares. También se han obtenido buenos efectos con aplicaciones foliares contra poblaciones de insectos de cuerpo blando, como son los huevos y larvas de lepidópteros, los pulgones, los thrips, las ninfas de moscas blancas, las cochinillas harinosas y otros que se desarrollan expuestos en los órganos de la planta.
Desde luego, el uso de la cal como plaguicida requiere cuidados especiales, ya que no debe mezclarse con ningún plaguicida químico o biológico y las aplicaciones se deben realizar después del riego o la lluvia. Tampoco debe aplicarse contra plagas del suelo; ya sean fitopatógenos, fitonematodos o insectos, porque puede tener efectos adversos sobre el funcionamiento del suelo, como por ejemplo cambiar su acidez.
Zeolita. Las zeolitas se presentan de forma natural en rocas de origen volcánico y son minerales del grupo aluminosilicatos hidratados, compuesto por aluminio, sílice, hidrógeno y oxígeno; organizado en una estructura tridimensional altamente estable; conformada por cristales de zeolitas que poseen una red de micro poros conectados entre sí.
Se utiliza en tratamiento (peletización) de semillas contra hongos fitopatógenos, mezclado con el hongo antagonista Trichoder-ma harzianum. También se puede mezclar (polvo fino) con las semillas para evitar ataques de gorgojos y polillas.
Azufre. Tiene acción fungicida y acaricida inorgánico. Actúa por contacto, compite por el oxígeno en la respiración celular; ade-más, los radicales libres de azufre liberados afectan la actividad enzimática en el proceso de conversión de acetato a citrato y causan parálisis general en los ácaros, deteniendo el daño.
Se puede utilizar en arroz, brócoli, berenjena, café, cebolla, chile, coliflor, cítricos, frijol, mango, maní, melón, ornamentales (rosa), papa, fruta bomba, pepino, repollo, tabaco, tomate. Controla las enfermedades causadas por: Oidium spp., Erysiphe polygoni, Al-ternaria solani, Uromyces phaseoli, Colletotrichum gloeosporoides Peronospora sp, Oidium sp. También los ácaros Tetranychus sp, Panonychus spp., Aceria sheldoni, Vasates advens, Brevipalpus spp: Es fitotóxico en algunas variedades de pepino, melón y espi-nacas, asi como plántulas de tomate y cucúrbitas.

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